Ha llegado finalmente el día de la jornada electoral en Estados Unidos. Lo que es, por otra parte, una noche de prueba para las encuestas electorales. Después de que las encuestas fallarán en pronosticar el resultado de las elecciones hace cuatro años, en el que abrumadoramente aseguraban el triunfo de la candidata republicana Hilary Clinton, no falta quien mire con escepticismo los pronósticos electorales.
¿Qué sabemos hasta ahora de los pronósticos electorales que han hecho las encuestadoras para la contienda para definir al próximo presidente de Estados Unidos, que enfrenta al actual presidente republicano Donald Trump y al ex vicepresidente demócrata Joe Biden? Claire Durand, presidenta de la Asociación Mundial de Encuestadores (WAPOR) y académica de la universidad de Montreal, ha analizado todas las elecciones nacionales que se publicaron hasta las 11:00 del lunes 2 de noviembre.
Aunque en las últimas semanas, las encuestas han detectado un ligero descenso en el apoyo al candidato demócrata Joe Biden, se estima que el ex vice presidente haya mantenido una ventaja promedio de ocho puntos sobre Donald Trump. Con la misma metodología, en 2016 este análisis mostraba una ventaja promedio para Hilary Clinton de cinco puntos en este punto de la elección.
Se ha discutido que las diferencias en las estimaciones derivadas de los modos de administración de la encuesta pudieron ser las responsables del fiasco en 2016. Para este proceso electoral, si bien es cierto que las diferencias por modo de administración de la encuesta permanecen, en todos los modos de administración registrados Joe Biden mantiene la ventaja.
Los pronósticos de las encuestadoras para este proceso electoral son claros: Joe Biden sería el próximo Presidente de los Estados Unidos. No hay que olvidar, sin embargo, que un proceso electoral es un sistema caótico de tipo dos. Como explica Yuval Noah Harari, el sistema caótico tipo 1 es susceptible de previsiones, pero no de alteraciones – como lo es el clima, por ejemplo. Los sistemas caóticos de tipo 2 son susceptibles de ser modificados por el comportamiento de los actores en cuestión.
Idealmente, las encuestas han hecho su trabajo para medir el apoyo a los dos candidatos en esta polarizada contienda electoral. No hay que olvidar que las respuestas de los actores en la contienda pueden llegar a ser más impredecibles que el apoyo que miden las encuestas.
«Referencia: «I think Biden will win», Claire Durand http://ahlessondages.blogspot.com/2020/11/i-think-biden-will-win.html